miércoles, 27 de febrero de 2013

Luisito





Vale, ahora me toca a mí. Me llamo Luisito “alías el espanzurrao”, ¿habéis visto mi video?… Me encanta tirarme al césped y rodar y rodar… es una pasada, se está tan bien… probadlo, os lo recomiendo. No hay nada como todas las mañanas hacer un poco de ejercicio “cespil” para tener un cuerpo gatuno como el mío. Y uno, y dos…grrrrrrr,  mira, mira, cómo muevo mis caderas…

Una vez he hecho mis ejercicios, me gusta acicalarme para acto seguido irme a desayunar un gran tazón de pienso… porque ya sabéis que es muy importante hacer un buen desayuno para poder aguantar una larga y dura jornada. Me encanta pasear de un sitio a otro, que si ahora por aquí, que luego por allá.

Sería maravilloso tener a alguien con quien compartir todo esto. Imagínate, te despertaría por la mañana con un suave ronroneo, grrrrr, me salen... estupendamente. Luego una vez despierto nos iríamos juntos a la cocina a tomarnos el desayuno, tú una cosa que los humanos llamáis café y yo un cuenquito de pienso… bueno algún día, no siempre, también si quieres, me puedes poner un poquito de paté, vamos, pero sólo un poquito. (ñam, ñam, qué rico!!!)

Luego yo me quedaría en casa, vigilando para que tú te pudieses ir tranquil@ a trabajar y te esperaría hasta tu regreso y haríamos ejercicio, veríamos la tele, jugaríamos… Sólo de pensar que esto pueda ser posible algún día me pongo tan feliz!!! Nos lo pasaríamos tan bien!!! 

Aquí te espero. No tardes… y uno y dos… cómo mola!!!

miércoles, 13 de febrero de 2013

Héctor, el gato humo

  Héctor es un gatito de humo, tiene su color, y como el humo es ligero, frágil, pequeño, tímido y bello. Y como el humo tiene en su interior un corazón cálido, lleno de cariño para dar. Como el humo pasa cerca de ti, a tu lado, sin tocarte, sin rozarte, en silencio. Le gustaría confiar, acercarse a los humanos, pero no se atreve; se acerca y se aleja. Necesita encontrar otro corazón cálido como el suyo, una mano que le enseñe lo que es una caricia, que puede confiar, un amigo que quiera llenar su vida de un tierno y cálido humogato.




 
 

miércoles, 6 de febrero de 2013

Sancho

SANCHO SINTECHO

Sancho, como su famoso tocayo, es simpático, bonachón, charlatán y amistoso. Todas las mañanas, antes de ir a por su desayuno a Don Jamón, donde siempre tiene la puerta y los corazones abiertos, hace su ronda dando los buenos días a todos sus amigos: de la estafeta de correos, de los bancos,..almas buenas que le hacen más llevadero su penar; les cuenta sus aventuras nocturnas, como se siente y escucha atento todo lo que le dicen. Porque Sancho es un buen conversador: le gusta hablar, pero también sabe escuchar y, siempre siempre, te mira francamente a los ojos.
Sus amigos procuran y procuran bien que nunca le falte la comida, así que está más bien gordito.
Además de hablar con sus amigos, a Sancho le gusta mucho tomar el sol.
Cuando atardece y el frío y la soledad se le clavan en los huesos, como el sintecho que es, busca refugio, calor, en el cajero de la CAM, cuya puerta buenas personas dejan entreabierta para que él pueda entrar y salir, según necesite.
Pero no penséis que es feliz, no. Sancho ha conocido el calor y seguridad de un hogar, el cariño y atención de una familia, su familia. Desalmados que no tuvieron reparos en abandonarlo, dejarlo solo a su suerte, traicionando todo el amor y compañía que Sancho les había dado. Eso es lo que, pese a tantos amigos como tiene, anhela: el calor y seguridad de un hogar, el cariño y cuidado de una familia.
Si le das la oportunidad, Sancho se convertirá en tu compañero fiel, siempre alegre, siempre dispuesto a escucharte con atención, a hacerte tanta compañía como necesites y a darte muchísimo más amor.